"Ojala no lo hubieras hecho,
pero hiciste lo que debías",
le dice la madre a Henri Fonda.
Increíble pero cierto.
Han pasado 70 años desde que se rodó
y está absolutamente vigente. Y va a más.
La brecha se abre y se abre.
"Las uvas de la ira", de Jonh Ford,
basada en la novela de Steinbeck.
- "Mamá, hasta ahora no te había visto ponerte así"
- "Porque nunca me habían dejado sin casa".
Lxs sacan de sus tierras con excavadoras,
como a tantas y tantos indígenas (mapuches,...).
Lxs deslocalizan, vive hacinadxs en campamentos,
como en el slum de Kibera, a las afueras de Nairobi
o de cualquier ciudad con problemas de obesidad.
Las familias se van desintegrando,
como todas las que sufren el exilio de la emigración.
- "Quieren humillarnos", dicen.
Pues claro que sí, humilladxs, con la autoestima por los suelos,
somos muñequitxs del "destino",
como si estuviera escrito tamaño despropósito humano
y ocurriera de forma natural.
Quienes les ven llegar, desde su vida "normal", dicen de ellxs:
"no tienen sentimientos, un ser humano no aguantaría tanta miseria",
como las que tiran sus bebés muertxs al mar desde las pateras.
Si son conscientes y lo cuentan son "agitadores":
"¿demasiada actividad en internet?",
insinúa el carabinero chileno al escritor Asel Luzarraga.
Interesante la campaña Stop SecretS.
Y todo a partir de que empieza a haber tormentas de arena,
o sea cambio climático, quizá ya inducido.
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